-
-
-
-
-
-
-
San Cristóbal
César Franov
MDR – 2009
Cierra tus ojos y escucha.
El bajo eléctrico es el hermano de la guitarra.
Es más alto y flaco, desgarbado y elegante.
No grita ni chilla, impone su cuerpo y colma el espacio con una vibración profunda, pesada, como la carga que lleva sobre sus hombros.
Cuando escuché por primera vez este disco, pensé en Patitucci, por la precisión y la sobriedad interpretativas.
Y la cuestión es que César Franov, nacido en Buenos Aires, estudió piano y comenzó su carrera como bajista a la edad de 15 años con «Los músicos del centro», una banda cordobesa que debutó como soporte de Lito Nebbia.
En el segundo disco participaron como invitados Fito Paez y Pedro Aznar.
Con Quique Sinesi, produjo un disco extraordinario: «Sonidos de aquél día», uno de los que no se consiguen.
Integró aquélla mítica Spinetta Jade, primero con Pomo Lorenzo (batería) y Leo Sujatovich (teclados), y más tarde con Juan Carlos Mono Fontana (teclados) y Lito Epumer (guitarra).
Después llegarían sus encuentros con Lito Nebbia, Fito Paez y Dino Saluzzi en presentaciones y grabaciones memorables.
En San Cristóbal atravesamos el tiempo, el tango, la milonga, la chacarera y el candombe; estaciones para las que no teníamos pasaje, pero nos sorprenden, tan inesperadas como hermosas.
